17.10.05

¡VAYA SUSTO TONTO, PUES!


En el saloncito gris, el Pater Familias se recuesta plácidamente en su sillón orejero. La princesita va a salir esta tarde a tomar un refresco con sus amigas y ha venido a solicitarle la paga.
- Papi, me das dinero para salir con mis amigas.
- Si princesita, toma cinco euros. Guárdate algo para comprarte cosas bonitas. Poco a poco, si retiras una pequeña cantidad, te harás con un montante importante.
El Pater Familias se deja dar un beso en la mejilla por su niña. Arancha está muy crecidita, es toda una mujercita.
- No vuelvas muy tarde hija.
- No te preocupes, me quedo a dormir en casa de Irachu, ¿no te lo ha dicho mamá?
- ¿Y quiénes son sus padres? - inquiere el progenitor.
- No quieras saberlo todo, deja a la chica en paz. - dice la matrona, Doña Maite.
- Es verdad, además nuestra hija es muy responsable.
La puerta se cierra y en la soledad del hogar el matrimonio se dedica a disfrutar de una plácida tarde de Otoño. La lamparita de la mesita del salón invita a una tranquila y sosegada conversación marido-esposa, esposa-marido.
- Maite...
- ¿Sí cariño?.
- ¿No crees que hemos tenido mucha suerte con nuestra hija Arancha?.
- Sí, José María, si tú supieras...
- ... - plantea Chema.
- Nada, que nuestra Arancha promete. Ha sacado unas notas que le han permitido entrar en la mejor Universidad. No te creas que todos los vecinos pueden decir lo mismo de sus hijos. La hija de Augusto, ya sabes, el director de la fábrica de cervezas que auditásteis el otro día, no ha podido entrar en telecomunicaciones. No me extraña, claro, ya sabes como son.
- Mujer, tampoco es para tanto...
- Ya, ya - dice Maite como subrayando la ingenuidad de Chema -, si no es sólo que no vayan a nuestra parroquia, se que se van a la otra, ya sabes, la de...
- Si, si, Maite, pero ya sabes que no me gusta hablar de esas cosas. A mi me apetece charlar con los amigos, vivir en paz tomando unos chiquitos con los compañeros de toda la vida, la sociedad gastronómica... Otras cosas ya sabes que me entristecen mucho. Somos gente pacífica, normal...
- Pero es que es todo - insiste Maite - . Todo esta relacionado. Si al final las cosas son como son. ¿Sabes que se comenta que ha abortado dos veces?.
- ¡Coño Maite!... Perdón, se me ha escapado el palabro. Quiero decir que pueden ser habladurías. No te gustaría que fueran comentando esas cosas de nuestra hija.
- No compares a nuestra hija, una niña de sobresalientes, con la chiquilla de los vecinos. A mi siempre me pareció muy suelta. Además, tu mejor que nadie sabes que esa gente, esos González y Valeros, con su acento murciano...
- ¿Qué tiene que ver el acento murciano?.
- ¡Chemari!, por favor, no te hagas el tonto. Que tienen esa cultura, que son más sucios. No son como nuestra familia. ¿No irás a negarlo?.
- Si tienes razón mujer. Por cierto, ¿conoces a los padres de Irachu, la chica a cuya casa se va ir a dormir nuestra hija?.
- Claro que si, Chemari. ¿Me crees tan irresponsable?. Su madre fue compañera mía de colegio y son muy buena familia. Ya sabes, gente de aquí de toda la vida.
- Bien, ya me los presentaras. ¡Vaya!, suena el teléfono.
- Ya lo cojo yo, José María.
La expresión de Maite es seria, incluso se pudiera decir que alarmada.
- Tranquila Ainoa, veras como llegan enseguida - le dice Maite a la madre de Irachu.
- ¿Qué es lo que ocurre? - interrumpe un preocupado Chema.
La matrona le indica con un gesto que se calle.
- Lo dicho, Ainoa. Ya verás como llegan dentro de nada. Además, si Arancha ha dicho que van a llegar pronto, es que van a llegar pronto. Menuda es nuestra Arancha para estas cosas. En cuanto lleguen nos llamas por teléfono, que mi Chema está empezando a preocuparse. Así que nada... Tenemos que quedar un día para que tu Ignacio conozca a mi marido. Que siii... Pues eso.
Cuelga el teléfono y tranquiliza a su marido. Va pasando el tiempo, y al dar las diez de la noche, el matrimonio empieza a inquietarse. Cuando deciden llamar a casa de Ainoa, suena el teléfono.
- Si.. Ainoa , ¿eres tu?. - La expresión de Maite se torna en espanto - . ¡Ay Dios mío!...¡Ay Dios mío!. Sí, sí, ahora mismo vamos para allí.
- ¿Qué ocurre? - dice un pálido Chema.
- A Ainoa le acaba de llamar la policía autónoma para que acudan al centro de planificación familiar que hace esquina con el banco.
- ¿Qué significa eso?.
- No los sé, Chema, no lo sé. Tenemos que ir ya mismo.
- ¿No tendrá algo que ver con los embarazos?. ¡Maite!, que ya te he dicho que era muy mala cosa murmurar de los demás. ¡Qué nos ha podido castigar Dios!.
- ¡José María , por favor!. No te pongas tremendo, que tu te pones muy tremendo - Maite intenta transmitir serenidad.
Después de vestirse decentemente van al garaje de la vivienda unifamiliar y salen dignamente de la urbanización en el BMW.
Cuando llegan al centro de planificación familiar se encuentran con Ainoa y su marido Ignacio que muestran una aparente calma. Uno de los problemas de este mundo es la comunicación. Les tocó un policía con no demasiado tacto y no les explicó que el centro no tiene nada que ver con el asunto. Aclarado el tema, y una vez que han quedado para hacer una buena comida con Ainoa e Ignacio, el Pater Familias y Maite vuelven a casa con una tonelada de aprensión menos sobre sus cabezas.
- ¡Tremendo!, ¡qué eres un tremendo!. Te lo digo siempre. Mira que pensar eso de nuestra hija...
Chema esta jovial. Realmente está exultante. ¡El susto que se ha quitado de encima!.
- ¡Ja, Ja!. Me río de los puros nervios.
- Claro - le palmea su esposa en el hombro - . Ya te comenté que posiblemente el retraso se debiera a alguna actividad del Campus. Por cierto, que conozco a los padres de Gorka, el monitor, y pensar mal de él es pecado.
- Ya mujer, pero podían haber llamado por teléfono.
- Es que no han podido después de lo que les ha pasado, que esa es otra. No pasa nada, pero es indignante que nos hagan eso. - Maite levanta severamente el índice.
- Sí. Bueno, al comisario le conoces, ¿no?. ¡Qué narices, Maite!, tú conoces a todo el mundo.
- No tanto, no tanto. Pero sí, a el comisario sí. Tu como eres de capital... Pero aquí , la buena gente nos conocemos todos. - Hace una pausa y prosigue - . Ese chico, el comisario, fue campeón nacional de Bersolaris. Si lo tienes que conocer...
Claro que a veces parece que vives no se donde...
- ¡Vaya susto tonto, pues! - exclama Chema.
Se miran, y después de sonreirse se abrazan contentos de que todo haya acabado bien. El fin de semana ya estarán las niñas y harán una fabulosa comida para las dos familias. Esta noche se conformarán con ver un programa de humor en la ETB.

EN OTRA CADENA DE TELEVISIÓN , EN CASA DE LOS MURCIANOS.

- “En la localidad Guipuzcoana de X., la Kale Borroca ha prendido fuego a un cajero automático y una sede del partido X. La sede del partido se encontraba frente a un centro de planificación familiar. En la sede ha sido encontrado un cuerpo sin identificar carbonizado. Se cree que pudiera ser un empleado del partido, pero los datos son inconexos. Fuentes de la organización X. han protestado por la detención de los jóvenes que presuntamente han llevado a cabo la acción. Eran tres personas que responden a las iniciales de A.E.U, I. A.G y G.U.U. Según nos cuentan, el Juzgado X de X se niega a admitir a trámite la denuncia por falta absoluta de pruebas...” -

3 comentarios:

Southmac dijo...

Jaja, tu post me resulta familiar, y eso que no soy murciano, aunque como si lo fuera ;)

(vas a tener que activar lo de las claves. Los spammers ya te postean hasta en verso)

PERCEBE dijo...

¿ No hay mercenarios rusos que encuentran el domicilio de los spamers y les revientan los huevos a patadas?. ¡Coño que hay gente para todo, alguno habrá!

Southmac dijo...

En no sé qué país spamear va a ser castigado con cárcel. A ver si cunde el ejemplo. De todos modos, para cuestiones sobre el fascinante mundo ruso, ya sabes, hay un blog de puta madre por ahí enlazado...

(por cierto, me han dicho que estás en la lista. A los chicos no les ha gustado tu post)